Mi Primer Terremoto

"Bueno salgan todos ordenadamente; los de la primera fila salgan rápido pero sin apresurarse, los de la segunda aun no, esperen, bueno pueden salir." Nunca he sentido pánico por los temblores, menos aun por los terremotos. Puedo decir que esa tarde, en el momento en el que empezó el movimiento, me quede viendo la decadente TV peruana, justo el programa de Raúl Romero del que recojo sus palabras tales y como las recuerdo. Pronto la luz se fue, y no tuve mas remedio que salir de mi hogar a matar el tiempo entreteniéndome con la cómica histeria de mis vecinos. Se de otros individuos que realizaron acciones muy similares a las mías, y eso en parte me hace sentir un individuo común y corriente de este país. Es que si algo de merito tiene la selección peruana, es a acostumbrarnos a desastres tan grandes como este. ¿O no?

Bah, lo se, empiezo a divagar. Podría ahora empezar a hablar de los mismos temas que ahora están en todos los periódicos y blogs del mundo, tales como la magnitud del terremoto, el desastre en pisco, los muertos, etc. Sin embargo, este sencillo y discreto blog, fiel a su estilo, hablara como siempre de las curiosidades y extravagancias que causo el terremoto. Cosas que, si es que existiera alguna penalización para los individuos que han cometido estos "crímenes contra la humanidad", tendríamos un par de casos que irían al paredón sin lugar a dudas.

Si lo se, me excedí con esto ultimo. Pero no me van a negar que ningún ser humano, dado el estado de catastrófico en el que se encuentra la ciudad de pisco tras el terremoto, hiciera un chiste cruel a algún residente de esa ciudad. Y claro, hay de aquel que ose hacer una cosa así! Imaginen que su hogar y toda su vida se han derrumbado en solo 3 minutos. Y que apenas una semana después de tan apocalíptico hecho, se le ocurra a algún mequetrefe instaurar en el calendario una fiesta nacional llamada "el día en que tu casa se derrumbó". ¿Al paredón con él no? Bueno, algo parecido es lo que hizo nuestro bien amado ministro de producción Rafito Rey. Veamos. Días después del desastre, mientras llovían las criticas por la ineficiencia del estado, se le ocurre la brillante idea de lanzar, como regalo diplomático a los colaboradores extranjeros, una botella de exquisito pisco llamado nada menos que (agarrense) ..."Pisco 7.9". Cifras que expresan la magnitud del terremoto. No les transcribo todas las criticas, insultos y las declaraciones del susodicho pues, no es mi intención, crear en el lector un sentimiento que se traduciría como " Incendiemos ya, incendiemos ya, incendiemos el congresoooo" .

Bueno, es que con los políticos que tenemos hoy en día a todos se nos escapa el instinto asesino. En tal contexto, acciones tan reprobables como la del chino ese en Virginia o la del par de locos en Columbine podrían parecer justificables si es que políticos ineptos hubiesen sido las victimas. Es mas, con todo este chuculum de bloopers administrativos tras el terremoto, no ha faltado el político que se ha subido al carro de la solidaridad, queriendo gritar al cielo "soy el único que hace las cosas bien". Según mis amistades, que se han abocado a la valiente tarea de ayudar en la zona afectada, no ha faltado por allí algún político trucho que les ha exigido ponerse un polo de su agrupación, o ha mandado víveres con su fotografía y un mensaje en la cubierta. Si señores, esto ha pasado en nuestro país. Castañeda Losio, nuestro (también) bien amado alcalde, en un arranque populista, ha hecho campaña valiéndose del sufrimiento y desesperación del pueblo. Y también! Como iba a faltar ese señor. El innombrable y muy repudiado dictador Venezolano, ¡¿Cuando deja pasar una ocasión para inmiscuirse en la política ajena?! Los víveres que han llegado como parte de su "ayuda humanitaria", no son más que parte de su campaña de anexión bolivariana. El diario "El País" de España publico lo siguiente como encabezado: "EL MISTERIO DE LAS LATAS DE ATUN CON LA CARA DE HUGO CHAVEZ. El Gobierno de Venezuela ha negado que el alimento que ha donado tras el terremoto esté etiquetado con la fotografía del Presidente. -La oposición peruana tampoco se ha adjudicado la autoría". Citando a Charlie García: "Say no more".

Pero, para variar, las piedras ya han llovido sobre Alan por la ineficiencia en pleno desastre; nada más que agregar. Algunos señalan que la ineficacia del plan para prevenir y solucionar estas emergencias no es culpa solo del estado, sino de los defectos estructurales de la población. Sin embargo, no podemos negar, que en el caso que mencionaré, la barrabasada la cometió el Estado y la población en sendo acto criminal. En pisco, una mujer a punto de dar a luz, que por no poder ser evacuada con prontitud, tuvo que ser asistida por unos rescatistas en una tienda de campaña. Según la información de "El País": "Sus padres han decidido llamarla España Olenca en honor a las personas que la Atendieron". Primero, palo para Alan por no responder como se debe a una emergencia de tal magnitud. Y segundo, palo para la madre por ponerle a su hija un nombre que le va a cagar de por vida! (¿Te imaginas llamarte Escocia, Ghana o Tayikistán?...Dios te libre).
Para terminar. ¿Quien dice que los terremotos son siempre desastrosos? Desastroso realmente es un calificativo que solo he utilizado para calificar a la selección peruana de mayores. Ellos si son desastrosos. Los que no son así son los Jotitas, ellos si la rompen. Pero volviendo al tema del terremoto, cuando Dios cierra una puerta abre una ventana como decía mi abuela. Y aunque no lo crean, los terremotos nos han traído mas gloria que pena a la historia deportiva peruana. El campeonato que mayor gloria le trajo al Perú fue el del año 70, en el cual nuestra gloriosa selección mayor de antaño, con "el Nene" Cubillas y "el Capitán de América" Chumpi (en esos tiempos teníamos buenos apodos) como referentes, llego a cuartos de final del campeonato mundial. Como sabrán, ese mismo año fue el terremoto que se llevo todo Yungay. Ahora, hemos sufrido un terremoto de similares magnitudes que dejo también una ciudad en ruinas. Paradójicamente, los jotitas llegan a un mundial en las mismas circunstancias, y ¡OH!, bendito destino, llegamos a cuartos de final también! Pucha, mi sincero deseo, quiero un terremoto cada año...